La ciudad de Citadella, con su maravillosa muralla abrazando protectoramente a la ciudad, fue construida en el año 1.220 al margen de las intenciones de la ciudad estado de Padua. Desde entonces, las peculiaridades por las que la urbe ha destacado internacionalmente son sus murallas y su situación estratégica con respecto al territorio de Padua. La propiedad está alojada en la estructura de lo que en su día fue una fábrica de seda del siglo XIX. Sus habitaciones son muy luminosas y proporcionan a sus huéspedes todas las comodidades necesarias para disfrutar de una estancia tranquila en un espacio que combina a la perfección tradición y vanguardismo. Todas tienen aire acondicionado y están equipadas con teléfono directo, minibar, TV y caja de seguridad electrónica. Además, el hotel incluye gimnasio, baño turco y jacuzzi, aparte de un maravilloso restaurante con amplios espacios interiores y exteriores que pueden acoger eventos especiales o cenas de negocios.