PROVINCIA: GUANTANAMO
Guantánamo es la provincia más oriental de Cuba. Su capital es la ciudad de Guantánamo.
La provincia limita con la base naval estadounidense de la Bahía de Guantánamo.
A la llegada de los colonizadores españoles, su actual territorio se encontraba abundantemente poblado por grupos aborígenes, quienes ya habían bautizado a la región con el nombre de «Guantánamo», que significa «tierra entre ríos».

Quizás el nombre de Guatánamo resulte más conocido en el mundo por ser el sitio de la controversial Base Naval de Estados Unidos, establecida en 1898 y empleada desde el año 2001 como prisión para albergar a cientos de presuntos terroristas.

La arquitectura de Guantánamo y su cultura son diferentes de las del resto de Cuba. La provincia está sólo a
80 km de Haití en su punto más cercano, a través del Paso de los Vientos. Guantánamo tiene también un alto número de inmigrantes y descendientes de
Jamaica, Haití, Puerto Rico (caribeños y antillanos) y franceses, razón por la cual muchos edificios son comparables con los del
barrio francés de Nueva Orleans.
Los sitios más destacados de la región, desde el punto de vista del turismo de naturaleza, son:
la Reserva de la Biosfera Cuchillas del Toa y el Parque Nacional Alejandro de Humboldt, que resguardan, en conjunto, una variedad impresionante de especies endémicas.
Guantánamo es un destino ideal para quienes deseen pasar unas vacaciones tranquilas en medio de un gratificante retiro natural lejos del bullicio y los lugares comunes del turismo en Cuba.
Baracoa


Las primeras líneas que recoge la historia sobre la fascinante región de Baracoa provienen de uno de los diarios de navegación de Cristóbal Colón, donde se describe una:
«montaña alta y cuadrada que parecía isla». El navegante genovés se refería a la singular formación montañosa de El Yunque, uno de los símbolos naturales de la región.


Pocos años más tarde,
en 1512, el célebre conquistador español
Diego Velázquez fundaría la
primera villa de Cuba, a la cual bautizó con el nombre de
Nuestra Señora de la Asunción, localizada en el importante
cacicazgo de Baracoa. La célebre
«ciudad primada» es el lugar en que comienza toda la historia colonial de Cuba.

El lugar parece detenido en el tiempo. Aún hoy se puede presenciar el encanto ancestral de los primeros años del siglo XVI: casas coloniales de ventanales amplios con balaustradas de madera, portones claveteados, un paisaje virginal y la vida rústica y apegada a las tradiciones más auténticas. La villa fue guardada de piratas por tres fortalezas españolas que en la actualidad cumplen con otras funciones.
El esquema urbano de Baracoa tiene su centro neurálgico en la Calle Antonio Maceo, desde la cual el visitante puede visitar la concurrida
Plaza Independencia, la
Casa de la Trova,
la famosa estatua del líder indígena Hatuey, quemado en la hoguera por negarse a abrazar la fe cristiana, y la
Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, que data de
1833 y alberga la Cruz de la Parra, una reliquia de renombre internacional por su antigüedad y significado histórico.


También sobresalen el
Museo de Arqueología, por su enorme y valiosa colección de piezas, la
Fábrica de Chocolate, y la
Fábrica de Cucuruchos, cuyos procesos productivos enteramente artesanales asombran por su autenticidad rústica.

En los dominios de Baracoa se incluyen
Playa Duaba, sitio elegido para el desembarco de una expedición patriótica en
1895, el
Parque Natural Majayara, y la Reserva de la Biosfera de Cuchillas del Toa. En una región aislada de la geografía oriental de la isla, entre espectaculares macizos montañosos y playas rústicas, bordeadas por almendros, uvas caletas y cocoteros, crece el prístino poblado.
Sin más, Baracoa es paraíso natural y síntesis histórica.
Guantanamo
.jpg)
La región que hoy ocupan la ciudad de Guantánamo y el valle homónimo estuvo abundantemente poblada por grupos de aborígenes, de ahí su nombre de origen taíno, que significa
«tierra entre ríos». Los primeros exploradores españoles de la región fueron
Cristóbal Colón y Diego Velázquez, en una fecha muy temprana. Sin embargo, el poblado se fundó en
1796, con el nombre de
Santa Catalina de Guantánamo, patrona de la ciudad. No sería sino hasta
1870 que alcanzaría la categoría de
villa.
Algunas edificaciones de interés son: la
Iglesia Parroquial de Santa Catalina; el
Antiguo Cuartel Español; la
Biblioteca Policarpo Pineda, que antes funcionaba como ayuntamiento; y el célebre
museo Palacio Salcines, antigua residencia del notable arquitecto local Leticio Salcines, que, con su estilo ecléctico armónico, es el edificio más representativo de la ciudad.

Por otra parte, el factor cultural termina por perfilar el singular atractivo de Guantánamo. En este sentido, sobresale la influencia francesa a raíz de una migración masiva de colonos durante la
Revolución de Haití. Del mismo modo, los sábados en la noche es el momento de las populares noches guantanameras, donde el colorido humano, la música y el aroma de la comida criolla toman las calles. Guantánamo es también sede, junto con Santiago de Cuba, de la tradicional
Fiesta del Fuego, que culmina con la simbólica
quema del diablo.
La ciudad Guantanamo es cuna de un ritmo único dentro de la cultura cubana: el Changüí. Emparentado estrechamente con el son cubano, el changüí resultó de la fusión de los prístinos ritmos kiribá y nengón.
En suma, los guantanameros son conocidos por ser un pueblo sociable, extrovertido y alegre, lo que le brinda a la ciudad un colorido humano distintivo.