Este hotel patrimonial goza de una ubicación privilegiada en Acireale, a tan sólo 10 minutos a pie de la Catedral y de la plaza principal. El Mar Jónico y la Reserva Natural de La Timpa se encuentran a 2 km, mientras que el magnífico Monte Etna está a tan sólo 45 minutos en coche. Además, los huéspedes estarán a 30 minutos en coche del aeropuerto de Catania Fontanarossa. Gran parte de su encanto proviene de sus paredes, que un día alojaron un convento del siglo XVI y que aún hoy conservan algunos de sus elementos pasados como el antiguo claustro. Sus huéspedes podrán disfrutar de momentos perfectos de relajación en las habitaciones, que han sido decoradas con acierto y ofrecen gran número de comodidades actuales, si lo prefieren, pordrán disfrutar de su precioso jardín de estilo inglés.