El hotel está rodeado de una hermosa playa en conjunto con el turquesa de las aguas características del Caribe Mexicano, magníficos arrecifes, como el Dzul Ha, y hermosos atardeceres. El hotel se edificó considerando el medio ambiente y el ecosistema que lo rodea; se tomaron las medidas necesarias para mantener un balance y armonía entre la naturaleza y las instalaciones de lujo. Cada una de las habitaciones fue diseñada y equipada con la más alta calidad de materiales, mobiliario y equipo, que en combinación dan ese confort y elegancia único del lugar. Al hospedarse, los huéspedes podrán disfrutar tanto de la tranquilidad como de la aventura de la vida isleña. El comedor y la cocina son el lugar preferido para disfrutar de la claridad y la vista que penetra a través de los balcones; lo que hace que la residencia tenga una iluminación y vista del mar envidiable.